Los integrantes de la Dirección de Veterinaria municipal recurrieron a un profesional de la salud animal especializado en aves para que les brindara asesoramiento -ad honorem- sobre los episodios de ataques a personas en la plaza 25 de Mayo.
El médico veterinario Juan José Vidueira se ha especializado en la atención de aves en su capacitación profesional por cursos de posgrado y con reconocida experiencia en tratamientos de enfermedades en distintas especies.
La trayectoria profesional y su permanente estudio de los comportamientos de las diferentes variedades de pájaros le permite asociar el comportamiento de la vida silvestre en entornos naturales con las conductas en espacios urbanos.
El reconocido profesional ha logrado individualizar a la especie que habría provocado los ataques y los motivos que la habrían llevado a defender el territorio de crianza de sus pichones ante lo que consideran amenazas por la presencia de personas.
Para Vidueira los integrantes de la comunidad deben ser precavidos al circular por la plaza sabiendo de antemano que las aves están en época de reproducción; y que “si estamos atentos se puede evadir el ataque de las mismas”. Y enfatizó que “si bien la especie no está en peligro de extinción, goza de la protección de las leyes locales de fauna y son un eslabón necesario en la cadena trófica del ecosistema”.
En un posteo realizado en sus redes sociales intenta llevar a reflexión sobre la convivencia con nuestra fauna autóctona en armonía sabiendo que la conducta de algunas especies puede interferir con nuestra tranquilidad, y que utilizando nuestros conocimientos la convivencia es posible.
Rapaces peligrosas o rapaces en peligro
“Hace ya un año me consultaron de Municipalidad de Pergamino por unas rapaces que atacaban a la gente en la plaza 25 de Mayo”.
“Por los dichos de los damnificados apuntábamos a los caranchos, aunque en el relevamiento vimos cuatro especies de rapaces en la plaza”.
“Luego, este año -concomitante con la época de cría- volvieron a embestir a la gente que circulaba por la plaza, provocando heridas con sus garras”.
“Por un testimonio desciframos que no eran los caranchos sino los gavilanes mixtos, “Parabuteo unicinctus”, quienes cuidaban de sus pichones. Por cierto; como muchas especies -incluida la nuestra- lo hacen”.
“Fui a la plaza a fotografiar a los pichones, que ya tienen el tamaño de los padres y tuve la ingrata sorpresa de encontrar a la madre muerta”.
“Creo, de corazón, que la respuesta al título es que los peligrosos, seguimos siendo los humanos, heridas leves de un ave defendiendo lo suyo versus la muerte de un ave protegida por nuestras leyes con fractura y aplastamiento de cráneo por mano humana”.
“Repensar el contrato social intra e inter específico creo que es la tarea a futuro”.
“Por más animales silvestres en convivencia con humanos, solo queda velar por la salud del resto de la familia de rapaces urbanas”
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